El Obispo bendice Nuevo Rumbo

El domingo 10 de julio, Don Adolfo González, Rvdmo. Obispo de la Diócesis, ofició una misa en la Comunidad Terapéutica La Milagrosa, en la que bendijo el Nuevo Sagrario de su Capilla. Estuvo acompañado por el Capellán actual de Nuevo Rumbo, Rvdo. José Mª Sánchez, párroco de San Isidro, y el Párroco de Campohermoso Rvdo. Antonio Manuel Hernández.

Asistieron como invitados destacados el Alcalde de Níjar, Antonio Jesús Rodríguez acompañado del concejal de Igualdad y Bienestar Social, Francisco Javier Herrero y otros ediles de distintas áreas. Asimismo la gran familia de Nuevo Rumbo, compuesta por todos sus trabajadores, colaboradores y familia, y representaciones de otras instituciones dedicadas a labores sociales, colectivos que trabajan con drogodependientes en prisiones, Hermanas Mercedarias.

D. Adolfo, en uno de los momentos de su Homilía dijo que dendecía un Sagrario para que Dios tuviera su Casa en esta Comunidad y acompañase a todos en cada momento, y animó a Sor Dolores a seguir con esta labor dedicándole unas palabras de reconocimiento y reconfortándola por su trabajo de veintisierte años al frente de Nuevo Rumbo.
En el momento de las Ofrendas, se le entregó un Dosier del Trabajo que ha sido Premiado con el Reina Sofía de Cruz Roja y un interno en nombre de todos le dio las gracias por su presencia en esta Casa. Efectuada la bendición del nuevo Sagrario, monseñor González hizo entrega de sus llaves al Capellán de la Comunidad, D. José Mª que las custodiará como Párroco de San Isidro. Conversó con los residentes y se interesó por sus inquietudes, descubrió sendas placas dedicadas al Papa Juan Pablo II y al primer paciente tratado en nuestro Centro, Paco Orta, a los que se les dedicaron dos calles del entorno de las instalaciones.

Escrito al Sr. Obispo:

Bienvenido porque esta Casa es Iglesia, y en su persona reconocemos a los Apóstoles enviados por Jesús al mundo para que la Buena Noticia sea conocida y vivida, en la unidad visible y la comunión.

Esta Casa nació fruto de la fe y la coherencia de quien ama a Dios y sabe que debe igualmente amar a los demás. Por eso, le transmito en esta mañana la más alegre bienvenida en nombre de todas las personas que hacen que Nuevo Rumbo sea una realidad viva.

Y Gracias. Porque su presencia nos conforta, y nos ayuda a saber que Dios está muy cerca de nosotros. Esa es la mejor medicina, la mejor terapia, la mayor esperanza.

Viene a hacer con nosotros lo mejor y más grande: celebra la Eucaristía. Es el mejor regalo que puede hacernos. Que Dios se lo pague. Rece mucho por nosotros, pues nosotros ya lo hacemos por uste.